
Al final, no son los años en nuestra vida lo que cuenta, sino la vida en nuestros años.
Cada imagen transforma lo cotidiano en una escena mágica y única. Los charcos,cristales.. se convierten en espejos temporales que revelan paisajes urbanos, cielos y personas desde otra perspectiva.
La serie invita a detenerse, observar y redescubrir la belleza oculta bajo nuestros pies. Es una celebración del presente, de lo que existe solo por un instante. Con sensibilidad visual, convierte lo efímero en eterno. El agua refleja más que imágenes: refleja emociones